Hogar Tu salud Técnicas de relajación para la depresión

Técnicas de relajación para la depresión

Anonim

La depresión le quita perspectiva y se vuelve difícil ver la vida objetivamente. Los pequeños irritantes crecen en magnitud y los grandes problemas se vuelven abrumadores. El estrés es un factor importante en estas respuestas. Las investigaciones nos dicen que en la mayoría de los casos, los dos primeros episodios de depresión mayor son inducidos por el estrés. Si la condición se repite una tercera y continua, el consenso indica que la causa puede ser genética. De cualquier manera, para mantener a raya el estrés mientras te recuperas y para evitar una recurrencia, considera probar algunos antídotos. Es posible que estas actividades simples traigan alivio ahora, y placer constante cuando se haya recuperado.

Salga al aire libre.

No se trata de una dosis diaria de vitamina D. Más bien, el aire fresco, el sol, los pájaros cantores y las flores florecientes conspiran para producir paz y felicidad. Cuando el clima lo permita, tome una taza de té o café por la mañana afuera. Inhale profundamente y exhale lentamente. Escucha, mira y aprecia el nuevo día. Llene el bebedero para pájaros o plante una maceta de flores. El mundo de la naturaleza espera afuera de tu puerta, listo para deslumbrarte y sorprenderte.

advertisementAdvertisementAdvertisement

Avanzar hacia la salud.

La depresión mayor causa daño en el cuerpo y dolor en el espíritu. Entonces, la idea del ejercicio puede parecer intimidante o totalmente fuera de discusión. Sin embargo, los estudios muestran que la cantidad más pequeña de actividad física puede ayudar en todos los aspectos de la recuperación. Comience poco y pida a un amigo que participe con usted. Puede ser una corta caminata alrededor de la cuadra, o un crucero por el centro comercial. Prométate una recompensa cuando termines, y aumenta la bonificación a medida que la actividad aumenta. Hágalo a diario, hágalo disfrutar y observe los beneficios.

Disfruta de buenos aromas.

Las fragancias desencadenan recuerdos felices y persuaden a la mente para que se relaje. Lavanda, por ejemplo, es bien conocida por sus propiedades terapéuticas. Puede tener otros como favoritos personales. Encuentre una vela perfumada que disfrute, un rociador de lino para rociar su almohada, o un clavel picante para adornar su mesita de noche. El arte de la aromaterapia se puede personalizar según sus preferencias, y tiene la capacidad de cambiar la atmósfera que lo rodea.

AdvertisementAdvertisement

Alimente su cuerpo.

Un cuerpo bien alimentado alimenta el espíritu en la lucha por la recuperación. Cuando le falta el apetito, intente comer pequeñas cantidades de alimentos nutritivos con más frecuencia en lugar de saltarse una comida o buscar comida chatarra. Incluya cítricos, verduras de hoja verde, huevos, frijoles, plátanos y granos integrales para obtener propiedades potenciadoras de la energía. Es un adagio antiguo, pero cierto: el desayuno es la comida más importante del día. Si comienzas a alimentarte, es menos probable que ocurra la depresión de un cuerpo hambriento. Observe la ingesta de azúcar, productos horneados y pastas (carbohidratos refinados), ya que pueden causar un pico de energía y caída. Cuando sea posible, cene con la compañía.Una conversación fácil durante la comida hace que todo sepa mejor. Elija un tema ligero; no se permiten discusiones estresantes a la hora de la comida.

La risa es la mejor medicina.

Bueno, quizás no sea el mejor. Sin embargo, una risita o sonrisa puede alterar dramáticamente la complexión del día. De acuerdo, a veces puede no estar en la pantalla de tu radar. Pero piensa en alquilar la película más divertida que jamás hayas visto. Omita los que tienen una trama pesada. Piensa sin sentido y es divertido. Reírse de cosas simples (no se permite el humor a expensas de otra persona). Para un entretenimiento fácil, alimente a las ardillas y observe sus travesuras. Echa un vistazo a las reposiciones de Johnny Carson en YouTube. Busque el humor en la vida cotidiana. Permítete un minuto para reír, sonreír, reír, y finalmente, reír.