Nefroptosis: Definición, causas y síntomas
Tabla de contenido:
- Descripción general
- Síntomas
- ¿Qué causa la nefroptosis?
- Tratamiento
- Complicaciones
- Perspectiva <999 > La mayoría de las personas con nefrotosis no tienen ningún síntoma y la condición es inofensiva. No se recomienda ningún tratamiento en estos casos.
Descripción general
La nefroptosis es una afección en la que uno o ambos riñones caen al abdomen al ponerse de pie. Los riñones son un conjunto de dos órganos en forma de frijol responsables de filtrar los desechos de la sangre y producir la orina en el cuerpo. Están ubicados en el abdomen a ambos lados de la columna vertebral, justo debajo de la caja torácica. La nefroptosis también se puede llamar riñón flotante, riñón errante o ptosis renal.
La gran mayoría de las personas con nefroptosis no experimenta ningún síntoma y no requiere ningún tratamiento. Las personas con casos graves pueden necesitar una cirugía llamada nefropexia laparoscópica para sujetar el riñón en el lugar adecuado. Sin embargo, la mayoría de los casos de nefroptosis son benignos y no requieren atención médica.
AdvertisementAdvertisementSíntomas
Síntomas
La mayoría de las personas con nefroptosis no tienen ningún síntoma. En algunas personas, los síntomas aparecen al ponerse de pie y, a menudo, se alivian cuando están acostados. Estos síntomas incluyen:
- un dolor agudo en el costado (flanco) que se irradia hacia la ingle
- náuseas
- vómitos
- presión arterial alta
- una masa abdominal cuando está de pie
- una sensación de pesadez en el abdomen
- hematuria (sangre en la orina)
- proteinuria (exceso de proteína en la orina)
- historia de infecciones urinarias (ITU) repetidas
Aproximadamente el 70 por ciento de los casos de nefroptosis afecta el riñón derecho, el 10 por ciento afecta solo al riñón izquierdo y el 20 por ciento afecta a ambos riñones.
AnuncioCausas
¿Qué causa la nefroptosis?
La nefroptosis es una enfermedad congénita, lo que significa que naces con ella. Al igual que los otros órganos, los riñones son relativamente móviles. Pueden desplazarse normalmente un par de centímetros sin problemas. Sin embargo, en la nefroptosis, el riñón o los riñones descienden más de cinco centímetros cuando se mueve de una posición acostada a una posición erguida. La razón exacta de esto no se entiende bien. Se cree que el movimiento del riñón está relacionado con el apoyo insuficiente de ciertas estructuras o el tejido conectivo que rodea los riñones.
La nefroptosis es más común en mujeres que en hombres, particularmente en mujeres delgadas. Se estima que ocurre en hasta un 20 por ciento de las mujeres. Sin embargo, dado que del 80 al 90 por ciento de las personas con nefroptosis no tienen ningún síntoma, no se conocen los números exactos.
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Tratamiento
La nefroptosis se considera una afección benigna. El tratamiento solo se recomienda en personas con síntomas.
En el pasado, se recomendaba el aumento de peso, acostarse con frecuencia, corsés o vendajes abdominales y ejercicios abdominales para ayudar a tratar los síntomas. Desafortunadamente, tales tratamientos conservadores han demostrado poco éxito en el manejo de los síntomas. Ya no son recomendables.
La nefroptosis ahora se trata con un procedimiento quirúrgico conocido como nefropexia laparoscópica.Es importante considerar cuidadosamente los riesgos de someterse a una cirugía. En este procedimiento, el riñón flotante se asegura en su posición normal. La nefropexia laparoscópica es un tratamiento moderno mínimamente invasivo. Se hace bajo anestesia general. El procedimiento generalmente toma 45 minutos y requiere una estadía en el hospital de dos a cuatro días.
En el pasado, la nefropexia era un procedimiento controvertido. A menudo era ineficaz y conllevaba un alto riesgo de muerte. Estos problemas pueden haber sido causados por un diagnóstico deficiente y porque se realizó como una cirugía abierta. El procedimiento fue tan ineficaz que durante un tiempo los urólogos lo abandonaron casi por completo.
La versión moderna del procedimiento es mucho más segura porque se realiza por laparoscopia. Esto significa que el procedimiento se realiza a través de pequeñas incisiones con la ayuda de una cámara. Los avances en el diagnóstico y la metodología quirúrgica también han hecho que la cirugía sea mucho más efectiva.
AnuncioComplicaciones
Complicaciones
Algunas personas con nefroptosis sintomática pueden experimentar un síndrome llamado crisis de Dietl. En la crisis de Dietl, el riñón flotante obstruye el uréter, el tubo angosto que va del riñón a la vejiga.
Esto puede ocasionar:
- dolor violento en el flanco
- náuseas
- escalofríos
- taquicardia (frecuencia cardíaca rápida)
- producción urinaria baja
- hematuria (sangre en la orina)
- proteinuria (exceso de proteína en la orina)
- un riñón agrandado y sensible
La crisis de Dietl generalmente se resuelve al acostarse y llevar las rodillas al pecho.
Las personas con nefroptosis también pueden experimentar infecciones urinarias frecuentes. Una ITU es una infección bacteriana, fúngica o viral de la uretra, la vejiga o los riñones. Los síntomas de una ITU en la uretra o la vejiga incluyen:
- ardor al orinar
- aumento de la frecuencia de micción
- orina con sangre
- orina turbia
Cuando los riñones están afectados, las infecciones urinarias pueden ser potencialmente mortales. Los síntomas de las ITU que afectan a los riñones incluyen:
- dolor y sensibilidad en la parte superior y laterales de la espalda
- escalofríos
- fiebre
- náuseas
- vómitos
Perspectiva
Perspectiva <999 > La mayoría de las personas con nefrotosis no tienen ningún síntoma y la condición es inofensiva. No se recomienda ningún tratamiento en estos casos.
En personas con síntomas, la cirugía suele ser el único tratamiento eficaz para ayudar a aliviar los síntomas. En el pasado, la cirugía para la nefrotosis era arriesgada y tenía una alta tasa de mortalidad. Los procedimientos quirúrgicos modernos son seguros y efectivos.
Un estudio evaluó la efectividad a corto y largo plazo de la nefropexia laparoscópica. Algunas personas informaron una disminución significativa del dolor, una disminución de las infecciones urinarias y una mejora general en la calidad de vida después del procedimiento. No hubo complicaciones mayores durante el transcurso del estudio.
